Carta a los mamertos del mundo

Bogotá, 28 de septiembre de 2010

Señores:
Mamertos del mundo

De la manera más cordial la mayoría de colombianos les pedimos, les solicitamos, les rogamos, que no sigan atacando sin fundamentos al mejor presidente que ha tenido el país en los últimos 50 años.

Ustedes que no saben nada del país, que no les ha tocado vivir las barbaridades a que nos tenía sometidos las llamadas Fuerzas Armadas Revolucionarias Farc, que nos mantuvieron en un régimen del terror por más de 40 años, los invitamos a que se dediquen a sus actividades ordinarias y no se metan más con Colombia.

Asesinatos, secuestrados, mutilados, robos, narcotráfico, infanticidio, bombas, fueron el pan de cada día en un país donde estos asesinos hicieron de las suyas por la falta de voluntad política para combatirlos por muchos mandatarios hasta que llegó a la presidencia Uribe, quien con mano firme y corazón grande nos ayudó a salir de ese infierno.

En estos últimos 8 años Colombia pasó de ser un país paria, líder en narcotráfico, desplazamientos forzados, desempleo y todo lo malo que se puedan imaginar a un país con un buen futuro, con inversión extranjera, con respeto a la disidencia, con turismo creciente, con un mejor mañana.

Hubo errores que no se pueden desconocer, pero gracias a la libertad de expresión y a los medios libres e independientes que tenemos en Colombia, éstos han salido a la luz pública y la justicia ha venido actuando en la medida de sus posibilidades.

Señores mamertos internacionales, por si no lo saben, en este régimen democrático, uno de los más sólidos del continente americano, la mayoría de colombianos elegimos dos veces seguidas a Álvaro Uribe Vélez como nuestro presidente y por sus buenos resultados lo hubiésemos elegido más veces si los mamertos nacionales, habidos del poder, no se hubieran inventado tantas triquiñuelas para cerrarle el paso a esta aspiración no de Uribe sino de la mayoría de los nacidos en esta bella tierra.

Señores mamertos internacionales Por favor dedíquense a sus quehaceres habituales y no se sigan metiendo con un personaje al que según varios líderes y medios mundiales y, sobretodo, la mayoría de los colombianos defendemos y elogiamos por su gran trabajo al frente de un país que hace 8 años no tenía sueños sino pesadillas y del que ahora todos nos sentimos orgullosos.